24 de noviembre de 2011

Jane Goodall: "Todos somos parte de un enorme ecosistema y recién ahora comenzamos a tener en cuenta el peligro de permitir que algunas especies se extingan" (2)


Los trabajos de campo de Jane Goodall han permitido hacer numerosos descubrimientos relativos a los hábitos de los chimpancés, como el uso y la fabricación de herramientas y la consiguiente transmisión de tradiciones que ello lleva aparejado, el omnivorismo de unos animales considerados durante años exclusivamente herbívoros, y el descubrimiento, la observación y el estudio de comportamientos de adopción, canibalismo, establecimiento de relaciones y estructura social. Ella, además, ha contribuido profusamente a la difusión de esos descubrimientos a través de libros científicos y para niños, y también mediante la producción de material audiovisual. Goodall es autora de más de setenta artículos, una decena de películas y numerosos libros (cinco específicamente infantiles), una producción muy extensa y traducida a varios idiomas. Entre sus obras cabe destacar: "My friends the wild chimpanzees" (Mis amigos los chimpancés salvajes), "In the shadow of man" (En la senda del hombre), "The chimpanzees of Gombe. Patterns of behavior" (Los chimpancés de Gombe. Modelos de comportamiento), "Through the window. 30 years observing the Gombe chimpanzees" (A través de la ventana. Treinta años estudiando a los chimpancés), "The ten trusts. What we must do to care for the animals we love" (Los diez mandamientos. Lo que debemos hacer para cuidar a los animales que amamos), "Reason for hope" (Gracias a la vida), "Harvest for hope" (Otra manera de vivir), "Hope for animals and their world"
(Esperanza para los animales y su mundo) y "Africa in my blood" (Africa en mi sangre). Decenas de documentales y películas se han rodado sobre Jane Goodall y su trabajo, entre ellos "Jane Goodall's wild chimpanzees" (Los chimpancés salvajes de Jane Godall), "Jane's journey" (El viaje de Jane) y "When animals talk we should listen" (Cuando los animales hablan debemos escucharlos). Para Goodall, la superpoblación es el mayor problema actual porque conlleva otros factores peligrosos, como la explotación desmedida de los recursos naturales, la contaminación y el consumismo. "Tenemos que producir alimentos para la cantidad de personas que somos y no de más, pensado en cuántos seremos", sostiene. "Está demostrado en cualquier sociedad, incluso animal, que cuanta más comida existe, más se reproducen los individuos". Su política de generar conciencia sobre esos asuntos está centrada en despertar el interés de los niños y los adolescentes a través del programa Roots & Shoots (Raíces y Brotes) que actualmente funciona en ciento veintitrés países, donde jóvenes llevan a cabo planes de trabajo con tres objetivos: ayudar a una comunidad, a los animales y proteger el medio ambiente. "Es importante trabajar con ellos porque entienden los problemas mucho más rápido que los adultos. Además, serán los médicos, maestros, empresarios y políticos del futuro", asegura. "Roots & Shoots habla de la esperanza de miles de jóvenes", agrega la primatóloga que, en los últimos años, viaja por países de todos los continentes dando charlas para concientizar sobre la necesidad de respetar el medioambiente y de poner fin a prácticas destructivas como la deforestación, la minería y la agricultura industrial. Así fue como viajó a la Argentina para participar del Congreso Forestal Mundial, brindar dos charlas y recibir el título de Doctor Honoris Causa de la Universidad Nacional de Córdoba. Lo que sigue es la segunda parte de la charla que mantuvo con Leonardo Moledo, a la que se agrega un resumen de la entrevista que le concedió a Luciana Díaz para la edición del 25 de Octubre de 2009 del diario "Perfil" en ocasión de su primera visita a Buenos Aires.


Hay otro tema sobre el que me gustaría preguntarle. Usted conoce a Peter Singer, lógicamente. ¿Está de acuerdo en términos generales con él?

Creo que algunas veces va un poco lejos, es un poco excéntrico. Pero, digamos, básicamente me hice vegetariana leyendo un libro de él.

Bueno, Peter Singer tiene una especie de cruzada contra los experimentos con animales, especialmente con simios, y me imagino que usted participa de ella.

Sí, no creo que tengamos que estar experimentando con ellos. Y sobre todo, y esto es lo que me han dicho muchos científicos, aparentemente todas las investigaciones actuales que traen beneficios para la salud humana fueron desarrolladas, no todas, pero sí la mayor parte, mediante la observación de poblaciones, la epidemiología, mediante simulación por computadora, mediante otras vías que no necesitan animales. Pero desafortunadamente, si se descubre una cura, antes de que se la puedan dar a la gente, por ley, debe ser probada en animales. La mayoría de los experimentos con animales son por esa razón, y ciertamente los chimpancés no son necesarios para la investigación. Muchos siguen diciendo que son necesarios porque, bueno, ésa es su vida, ¿no?, hacer experimentos sobre animales. Además, es la ley de muchos países.

Y usted piensa que hay que cambiar esas leyes.

Sí, claro que sí. Justamente ahora hay una prestigiosa comisión reunida por la Academia de Ciencias Norteamericana, por orden del Instituto Nacional de Salubridad, y el trabajo de esta comisión es debatir si los chimpancés deberían ser usados en los experimentos médicos o no. Obviamente yo estuve involucrada y participé dando mi opinión. Los resultados aparecerán ahora en noviembre, pero temo ciertamente que no van a llegar hasta el fondo del problema, nunca se van a atrever a decir "basta". No, no se van a atrever. Pero tengo la esperanza de que por lo menos digan que va a ser muchísimo más difícil usar chimpancés y experimentar sobre ellos, y que haya que tener un motivo muy fuerte para usarlos. Y siempre en mejores condiciones también.

Pero no sólo se utilizan chimpancés o simios.

Claro que no, perros y gatos y...

Y a veces de manera muy cruel.

Son realmente horribles. Los odio. No deberíamos estar practicando esta tortura. Y durante mucho tiempo los que experimentaban con animales sostuvieron que los animales no tenían sentimientos, no tenían emociones. Y ahora hemos comprobado que tienen, así que ahora que los que experimentan con animales aceptan que los animales tienen sentimientos y dicen "ahora entendemos que esto no es agradable entonces vamos a intentar"...

Pero no es bueno para nosotros, además...

No, claro, es desagradable para nosotros también. Es definitivamente malo para la persona que inflige dolor, pero ellos ahora están diciendo: "Lo entendemos, entonces vamos a intentar usar unos pocos animales, los menos posibles, y tratarlos lo mejor que podamos". Y yo quiero que digan otra cosa, yo quiero que digan: "Lo entendemos, es cruel, y por lo tanto, juntémonos todos para pensar de manera más inteligente y encontrar otras formas así podemos investigar sin ellos, y lo más pronto posible".

¿Y usted cree que va a ganar esta batalla?

Estamos cerca de conseguirlo, porque ahora hay muchísimas alternativas que no existían quince años atrás, y todo el tiempo se están encontrando nuevas formas, y hay más dinero destinado a buscar alternativas.

¿Y qué cree? Usted es una persona extraña. Comencé esta charla diciéndole que usted es una persona extraña porque usted caminó a través de una de las líneas más misteriosas (creo que es uno de los misterios más grandes que tenemos, porque pienso que incluso el universo no es tan misterioso como el cerebro y la relación entre nuestro cerebro y el cerebro animal, y el misterio de la autoconciencia o conciencia). Pero, ¿usted pudo tener acceso? ¿O fue como Moisés y la Tierra Prometida, usted lo pudo mirar solamente de lejos? Me pregunto: ¿Cómo la cambió a usted conocer el cerebro de los chimpancés, cómo piensan, cómo se relacionan, qué desean?

Bueno, para ser sincera, real y verdaderamente, no creo que eso me haya cambiado mucho, y ¿sabe por qué? Porque afortunadamente yo no fui a la Universidad y entonces no sabía nada de toda esa basura de que los animales no tenían sentimientos. Yo tuve un maestro hermoso cuando era chica, y ese maestro me enseñó: "Claro que los animales tienen sentimientos, claro que pueden solucionar problemas, claro que tienen emociones". ¿Sabe quién fue ese maestro?

¿Quién?

Mi perro. El me enseñó absolutamente todas estas cosas.

Sí, entiendo perfectamente porque mi maestra fue mi gata.

Y así es como funciona.

A mí no me gustaban las mascotas hasta el momento en que tuve una gata y entendí que me decía cosas, me hacía gestos, "vení acá", "abrí la puerta", y eso era pensar.

Sí, claro que piensan, y los gatos son muy pensativos. Los gatos pueden realmente imitar... Bueno, le voy a decir lo que realmente amo de todo esto. Durante mucho tiempo, por todo lo que decía la gente, todo lo que decían los científicos, los pájaros tenían una estructura cerebral diferente de la nuestra, y por lo tanto cuando el dueño de un loro decía "pero mi loro entiende las palabras que dice", el científico decía "eso no es posible porque la estructura cerebral es diferente y no tienen la habilidad cognitiva necesaria". Bueno, ahora está absolutamente comprobado que los científicos estaban equivocados y eso debido a dos cuervos con los que se estaba realizando un experimento en Oxford.

¿Cómo es eso?

Los cuervos tenían una prueba muy simple, tenían un pedazo de cable con un gancho en la punta y tenían que meterlo hacia abajo por un tubo y enganchar la comida para sacarla. Les resultaba bastante fácil. Hasta que en una oportunidad, por error, el alambre se rompió, se quedaron sin gancho y sólo con la parte recta. Lo metían, lo metían, lo metían y no conseguían nada, lógicamente. Hasta que uno de los cuervos agarró el alambre, lo sostuvo con una de sus patas, lo dobló y entonces pudo sacar la comida del tubo. Entonces todos los científicos dijeron "eso fue un error, fue solo una vez, fue un accidente". Y les dieron a los cuervos un alambre recto a propósito. Una vez más, uno de los pájaros dobló el final. Hizo lo mismo cada vez que probaron. Entonces otros científicos dijeron "bueno, es solamente uno de los pájaros, es simplemente un error". Pero, de todas formas, ¿por qué lo hacía ese pájaro? Ese cuervo era la hembra, y cada vez que sacaba la comida el macho la agarraba, entonces el macho no necesitaba doblar el alambre. Simplemente tenía que esperar a que ella lo doblara y sacara la comida. Ahora es sumamente popular estudiar el cerebro de los pájaros y la mente de los pájaros; todo el mundo lo está haciendo. Pero durante muchísimos años se dijo arrogantemente "los pájaros no pueden hacerlo porque su cerebro es diferente del nuestro y nosotros tenemos un cerebro único en el universo". Entonces ahora sabemos que no tenemos que creer en la gente que nos dice que no pueden hacer determinadas cosas, porque que su cerebro sea diferente no quiere decir que tengan razón.

Nosotros tenemos la palabra y ellos no, ¿eso hace la diferencia?

La capacidad cognitiva está ahí, aunque no desarrollaron el lenguaje. No sabemos por qué. En verdad podríamos preguntarnos por qué nosotros sí... Es probable que alguna presión evolutiva nos haya forzado a desarrollarlo. De todas formas, pudieron salir adelante sin él.

¿Hay algo más que me quiera contar?

Bueno, solamente hacer un comentario al pasar. No hay duda de que más allá de lo que pensemos de los otros animales, lo que aprendamos de ellos y lo increíbles que nos parezcan viviendo sus vidas, no podemos negar que hasta donde llega el intelecto, nosotros somos las criaturas más desarrolladas intelectualmente que caminaron hasta ahora sobre el planeta. Desarrollamos el lenguaje hablado, podemos hablar del pasado, podemos hablar del futuro, podemos tener una discusión, podemos hacer planes y entonces la pregunta es: cómo es posible que una criatura con tanto potencial e inteligencia esté destruyendo su único hogar. Esa es la gran pregunta.

Bueno, no sólo eso, no sólo es capaz de destruir su casa, también a otras personas.

Creo que hemos perdido sabiduría. Porque los indígenas solían decir que para tomar decisiones hoy primero tenemos que preguntarnos cómo esa decisión va a afectar a la gente del futuro. Hoy nos preguntamos cómo todo esto me afecta a mí ahora, a mi familia ahora. Esas son las preguntas que nos hacemos ahora.

¿Cómo podría mejorarse la situación del planeta?

Soy optimista con respecto a las nuevas generaciones. Creo que ellas puedan mitigar los niveles actuales de desastre ecológico. Los políticos no van a defender los ideales cuando hay recesión en el mundo. Eso debemos hacerlo todos nosotros. Tenemos que tomar conciencia de que muchas personas la están pasando muy mal. Todos los días, cada uno de nosotros puede hacer la diferencia. Confío, además, en la capacidad del cerebro, el cual se expandió en las últimas décadas como signo de la evolución. Si logramos utilizar toda su capacidad, podremos hacer mucho más. El espíritu indomable del hombre es una de las causas de la esperanza. Pero si no logramos unir el cerebro con el corazón, no podremos salir adelante.